La Sensación de Impunidad que se Refleja en el Ataque a los Ciudadanos Estadounidenses en Matamoros, Tamaulipas.

La impunidad es definida como una falta de castigo o escape de alguna sanción cuando se comete una conducta antisocial, en ese sentido viven grupos delincuenciales a lo largo del país.

El viernes 03 de marzo casi a mediodía, en pleno tráfico de una avenida con amplia circulación, un grupo de delincuentes mató a una mujer mexicana y secuestro a cuatro personas que posteriormente se supo eran ciudadanos Estadounidenses. El ataque y secuestro quedó grabado en video.

El caso se viralizó desde los medios televisivos convencionales y por medio de las redes sociales, lo que llamó la atención rápidamente del Gobierno de Estados Unidos de América, lo que provocó que el Gobierno de México, iniciara frenéticamente la búsqueda de las personas secuestradas. Cabe mencionar que los operativos de búsqueda sucedieron después de la presión de Estados Unidos ante el hecho.

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Y es que estos secuestros, ataques, homicidios y desapariciones de personas suceden todos los días en México, con tal saña, dolo y si vergüenza ni miedo de ser vistos o señalados. Pareciera que se sienten impunes, protegidos y seguros de que la autoridad, encargada de proteger los derechos de los ciudadanos y de mantener la seguridad, no los tocará.

Ésta sensación de impunidad no la tienen porque así lo han querido, la han comprendido desde la corrupción, inoperancia, ineptitud y miedo de quienes deben hacer cumplir la ley.

En México hay miles de delitos que ni siquiera son investigados, y cuando alguno lo es, la aplicación de los recursos de investigación son débiles y sin atender los lineamientos procesales establecidos, lo que hace que no se sigan líneas de investigación adecuadas, que se tenga que dejar libres a los culpables y que no se haga justicia. Lo que contribuye a que los ciudadanos pierdan la confianza en las instituciones y que los delincuentes tengan menos barreras para poder inclinarse a los actos delictivos.

La corrupción se puede expresar de muchas formas, en cuanto a dejar operar a los grupos delincuenciales por cuotas o por miedo, ostentar un cargo para el que no se encuentran capacitados o dejar sin recursos a las instituciones para combatir la delincuencia.

La historia de los Estadounidenses asesinados y secuestrados pareciera haber terminado con la localización de los cuerpos y de las personas con vida, pero no es así, aún falta que se lleve a la justicia y se les aplique la ley a quienes realmente perpetraron los homicidios de la mujer Mexicana y de los Estadounidenses, así como a quienes los han protegido y les han hecho sentir a estos delincuentes que pueden salirse con la suya.

De igual manera, aún falta que se investiguen de esa misma manera, pronta y expedita, todos lo secuestros, homicidios y delitos en el país sin la necesidad de una presión extranjera. Lo cual, se ve muy lejos que pase.

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Omar Alejandro De León Palomo

El Autor es Escritor y Conferencista, Licenciado en Criminología con Maestría en Criminología y Ciencias Forenses (Posgrado Nacional de Calidad del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología). Autor del Libro “Definición Moderna de la Criminología de México” y Director de Criminociencia (www.criminociencia.com).

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